Es
evidente que no hay posibilidades
de ver buen fútbol en Misiones, esto nos
brindan solo equipos locales que enfrentan a rivales de jerarquía si traen jugadores
de renombre.
Pero, hasta el momento
muy pocos demostraron un alto nivel como para decir, salimos complacidos por lo
observado. Todo es mediocre.
Excepto un par de partidos del Argentino A o tal vez buscando en las
estadísticas alguno del Argentino B.
Por eso, el público en general es reacio a ir a las canchas, por estas
circunstancias, hasta el periodismo elige por sorteo cual encuentro cubrir esperando
tener suerte de ver un buen espectáculo.
Para
muestra sirve un botón. Desde que
comenzó la participación del “tren
del oeste” nadie, ningún medio, se acerco a los entrenamientos para ver las
prácticas. Hay
un par de excepciones, demostrando con ello también la falta
de concurrencia a los lugares donde se origina la información, por tener clubes en categoría superiores, como Guarani, Brown o Crucero, lo mismo pasa con las Instituciones locales huérfanos la mayoría.
Entonces el
club La Picada que está
realizando una gran inversión, porque actualmente cuenta con un plantel “muy caro”, y además mejora una cancha
“ajena” para poder participar, lo
mínimo que puede hacer es brindarle la posibilidad a sus hinchas y
simpatizantes de la zona para que puedan asistir un día domingo no laboral, a ver al equipo.
Los
demás clubes, ni el periodismo
influirán económicamente en este encuentro, si hay perdidas no aportarán si hay
ganancias no percibirán.
Porque el público no elige si tiene varios
partidos, va a la cancha a ver al equipo de su predilección, excepto que se
presente un boca o river.
Lo mismo pasa en la competencia local. Nadie
le resta gente a nadie, porque nuestra disciplina más popular por sí
sola está en decadencia y encima para matarlo del todo, la "Tele"
hace negocio aparte con las transmisiones y eso sí va en detrimento de la concurrencia.
Ojalá, tuviésemos más de tres partidos el domingo, así de
esta manera revalorizaríamos el día
futbolero por excelencia.
Y veríamos
también la cobertura de los medios, que tendrían que extremar recursos quedando al
descubierto las falencias de quienes pretenden informar de todos los eventos que se producen sin tener la mínima estructura periodística.
Por eso y por muchas cosas más, el
fútbol se muere, no solo los dirigentes son los culpables, y los hinchas no tienen por que pagar los platos rotos.